Michael Eisner es contratado como director ejecutivo de Walt Disney Productions. Anteriormente había trabajado como director de ABC y luego de Paramount Pictures. Con el tiempo, convertiría a ABC en propiedad de Disney. A él se le suele atribuir el cambio radical de la empresa a finales de los 80 y principios de los 90 e, irónicamente, su posterior caída a finales de los 90 y principios de los 2000. Dejaría la empresa en 2005.
Este fue el primer año en la historia de Disney en el que no se estrenaron largometrajes del estudio Disney, lo que podría deberse al cambio de propietario.